A pesar de la difícil situación que atraviesan decenas de familias a causa del COVID-19, el personal médico de la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital General Quevedo-IESS mantiene la atención humanizada en beneficio de sus pacientes.
Esta modalidad de servicio permite fusionar la técnica con el apoyo empático, a nivel psicológico para atención del paciente.
Carlos Sánchez, médico intensivista de la Unidad y líder del servicio, mencionó que junto a su equipo buscan aliviar el dolor del paciente a través de pequeñas acciones que para ellos son muy significativas. Este tipo de actividades no solo favorece la salud del paciente, sino a todo su entorno (personal médico y familiares).
“Tenemos pacientes que quieren escuchar diferente tipo de música, hablar con sus familiares por videollamada, que quieren dar un pequeño paseo e incluso, escribir notas de agradecimiento; el equipo del hospital lo hace posible. Para nosotros es importante empatizar con el paciente, porque sabemos que la están pasando muy mal por la enfermedad, por lo que buscamos aliviarlos física y emocionalmente” mencionó el galeno.
El especialista agregó que un alto porcentaje de pacientes presentan delirio de cuidados intensivos, es un trastorno que padecen los pacientes graves y se caracteriza por la alteración aguda de la conciencia, acompañada de desorganización del pensamiento y alteraciones de la percepción.
Edgar R., paciente es un paciente de 51 años, de Quevedo, que se encuentra internado hace 15 días. Estuvo de cumpleaños y su familia le hizo llegar escritos para levantar su ánimo, además de notas de agradecimiento al equipo.
Darío Cantos, director administrativo del Hospital General Quevedo, informó que el personal hace todo lo posible para restablecer la salud de los pacientes; sin embargo, hizo hincapié en las medidas de prevención que se deben mantener a toda costa, como evitar las aglomeraciones, el uso de mascarillas y el lavado frecuente de manos.