Indignación y descontento fue lo que sintió Iván Reinoso Baque, el pasado domingo 18 de febrero en la boletería de Transportes Macuchi de la Terminal Terrestre del cantón Quevedo.
Varios miembros de su familia se dirigían hasta la ciudad de Quito por lo que buscaron este conocido servicio de transportación pública, pero el descontento los invadió al encontrarse con la novedad de que todos quienes intentaban viajar a la capital debían pagar ocho dólares con veinticinco centavos.
La angustia se reflejó en varios de los rostros que estaban en la fila a la espera de poder llegar a su destino con el presupuesto que ya habían dispuesto para viajar. Es por esto que un grupo decidió llamar a la policía para denunciar esta irregularidad.
Otros por su parte pagaron el monto que solicitaba la cooperativa por lo que la misma ordenó que se hagan dos filas; una de quienes, si deseaban pagar y otra de quienes no, por lo que quienes no podían pagar ese precio tuvieron que esperar cuatro horas hasta que se les designase una unidad, esto como medida de represalia por parte de la administración de transporte Macuchi de la Terminal del cantón Quevedo.
