La novena etapa del Giro de Italia quedará grabada en la memoria de los aficionados al ciclismo como una jornada épica y llena de giros inesperados.
Los desafiantes tramos de tierra fueron el escenario de una intensa batalla que culminó con el belga Wout van Aert alzándose con la victoria, mientras que el joven mexicano Isaac del Toro hizo historia al arrebatarle la maglia rosa a los favoritos.
El polvo levantado por el paso del pelotón añadió un ingrediente extra de dificultad a una etapa ya de por sí exigente. Esta situación pasó factura a uno de los grandes contendientes al título, Primoz Roglic, quien sufrió una caída y posteriormente un pinchazo, perdiendo un tiempo valioso que lo aleja momentáneamente de la lucha por el liderato.
En medio de este caos controlado, el ecuatoriano Richard Carapaz demostró su calidad y experiencia. La ‘Locomotora del Carchi’ supo navegar con inteligencia los tramos más complicados y, en un final de etapa no apto para cardíacos, lanzó un potente ataque en el último kilómetro, cruzando la meta en una destacada cuarta posición.
Este resultado catapulta a Carapaz al cuarto lugar de la clasificación general, descontándole además 45 segundos cruciales a Roglic. El carchense confirma así su excelente estado de forma y se posiciona como un serio contendiente para la pelea por el título del Giro.
Tras esta emocionante jornada, los ciclistas disfrutarán de un día de descanso el lunes 19 de mayo.
La competición se reanudará el martes 20 con la décima etapa, una contrarreloj individual de 28,6 kilómetros entre Lucca y Pisa, donde se espera una nueva reconfiguración en la clasificación general y se pondrá a prueba la fortaleza de los aspirantes a la maglia rosa.
