A sus 11 años, Justin Varas no pensó jamás en presentarse frente a un público a interpretar villancico junto a sus compañeros de séptimo grado de la Unidad Educativa Adolfo María Astudillo.
La pequeña Shirley tampoco imaginó utilizar el uniforme de su institución acompañado de una muceta y un gorro de colores blanco con rojo como parte del atuendo solicitado para el coro navideño, organizado por cuarto año consecutivo por la Alcaldía de Babahoyo.
“Estaba muy nerviosa y contenta a la vez porque pude participar en algo que me había preparado en la escuela y en casa gracias a la ayuda de mis padres”, confiesa la menor luego de haber intervenido en el luminoso escenario al pie del Árbol de Navidad.
PARTICIPACIONES
Desde sus asientos, los presentes aplaudieron cada presentación en la que también participaron estudiantes de los centros educativos Juan E. Verdesoto, Isabel La Católica y el inicial La Mercedes.
La preparación de los niños y la alegría que esbozaban era evidente en este evento que se desarrolló el reciente domingo en horas de la noche en el Parque central.
Para Hilda Ronquillo, docente de la escuela Astudillo, los coros navideños representan valores como la unión familiar y el compañerismo entre los niños, lo cual se enseña en las aulas. “Más allá de interpretar música, es el encuentro predilecto para hablar sobre el significado de la Navidad y del amor”.
‘SANA DISTRACCIÓN’
Para el ciudadano Richard Campozano estos eventos empoderan a los babahoyenses de amor, cariño, paz y armonía. “Muchas felicitaciones al alcalde Johnny Terán por fomentar estos coros que ponen voces y almas al sentir navideño. Junto a mi familia estoy muy complacido de disfrutar cada fin de semana de estos programas de sana distracción”, culminó el babahoyense de 43 años.