Nunca se imaginó que un virus iba a arrebatarle a quienes más amaba. A finales de marzo, Alexandra Murillo Zamora lloraba la muerte de siete familiares: Mercedes Zamora (88), Abel Zamora (63), José Luis Zamora (42), Julio Zamora (58), René Quintana (68), Margarita Romero (60) y María Espinoza Zamora.
Todos ellos perdieron la batalla contra el Covid-19 en el pico más alto de la pandemia. Lo más deplorable, es que Murillo no pudo despedirse. “A mí la pandemia me tocó pasarla en Estados Unidos, no pude regresar porque cerraron el aeropuerto, enterarme desde allá y no poder asistir, fue lo más difícil”, expresó.
La muerte de su primo, Luis Zamora (42), fue la que más le conmocionó, ya que dejó a una pequeña en la orfandad y a su esposa sola. Ella lo describe como un hombre fuerte y todavía no puede resignarse a que haya fallecido por el mortal coronavirus. “Mi primo fue en principio al Hospital del IESS pero le dijeron que no había camas, allí perdió dos días porque ya tenía los pulmones devastados. En eso, tuvo que visitar el Sagrado Corazón de Jesús, pero gracias a unos contactos lo trasladaron al IESS porque necesitaba entubación, pero no pasó ni tres horas y falleció”, relató.
Aún lee los mensajes que tuvo con Luis días antes, en la cual le comentaba que tenía gripe y varios dolores. Su tía Mercedes (88) y su primo Abel (63) murieron en el Hospital Sagrado Corazón de Jesús. Recordó que ellos gozaban de tan buena salud, que le impactó el fallecimiento de ambos. “No duraron ni 24 horas en el hospital, fue una pena consecutiva y algo inesperado. Mi primo era abogado y en el trajín contagió a mi tía”, lamentó.
En pocos días murió su tío de Guayaquil, René Quintana (68). Su familiar salía comúnmente a realizar las compras del hogar, pese a las precauciones que tomaba se contagió, y con la hipertensión, sus órganos no aguantaron. Finalmente murió en casa. Antes del Día de Los Difuntos, por fin su familia pudo reunirse en un cementerio, conversar, recordar anécdotas, llorar juntos y tomarse unas fotografías. El dolor sigue en pie, pero ahora son más unidos.
En una semana perdió a tres de los suyos
más personas se cuiden del virus.
La historia de Yuri Pérez es otra que a muchos ha sorprendido. Él perdió a tres de los suyos durante la pandemia del Covid-19. Mientras conversaba mostraba una fotografía donde celebraran el cumpleaños de su madre, Placida Carranza, meses antes de que esta muriera a causa del virus. Todo empezó cuando la mamá de Pérez viajó a Guayaquil para una consulta médica en el hospital Abel Gilbert Pontón, cuando aún no empezaba la pandemia.
Su madre tenía una enfermedad que se le había detectado unos meses atrás, era un tumor. “Las consultas eran seguidas, así que tuvo que quedarse más tiempo. Fue en ese mismo momento en que el coronavirus llegó a Ecuador y mi madre decidió quedarse en casa de una hermana, lo tomamos de la mejor manera porque eran hermanas bien allegadas”, expresó Pérez.
Sin embargo, su madre estaba poniéndose mal de salud, hasta que recibió un mensaje de un sobrino, el cual le contaba la situación. Preocupado Yuri decide viajar a Guayaquil para traer a su mamá y tratarla con un especialista. “Mi madre estaba con una fuerte tos”, recordó. En Quevedo se enteró que era Covid-19 y la ingresaron de emergencias al Hospital Sagrado Corazón de Jesús. Sin embargo, no pasaron muchos días y falleció un 19 de abril de 2020, contó Pérez. En esa misma semana, un viernes 24 de abril, fallece su padre, Marcelo, presuntamente de un infarto por la presión alta.
Pero Pérez comentó que también tenía síntomas de Covid-19 y con el fallecimiento de su mamá, se puso mal, al punto de que no quería comer. “Nunca soportó la muerte de su esposa. Eran alrededor de 70 años de matrimonio y aún conservaban un retrato de su último beso de amor”, expresó.
El dolor continúo al día siguiente, 25 de abril, puesto que cuando Pérez lloraba el fallecimiento de su padre, se enteraba a la vez de la muerte de su hermano mayor, Albino. “Era sábado, fui a las 10:00 a su casa para dejarle unas pastillas, él presentaba una leve tos y fiebre la noche anterior; luego a lo que yo estaba de regreso, porque me sentía un poco mal por la muerte de mi familia y porque también estaba presentando algunos síntomas, me llaman y me dicen que mi hermano se puso mal.
Llamé al ECU 911 y lo que pudieron constatar es que ya también mi hermano había muerto”, relató. Pérez compartió algunas fotografías que tiene guardadas en su teléfono celular, de los tiempos vividos junto a su familia. Momentos felices. La pandemia le arrebató a su madre, padre y hermano, por lo que ahora pide a la ciudadanía tomar enserio el virus. En los meses de marzo y abril se duplicaron los muertos en Los Ríos. Según las autoridades, fue consecuencia de la pandemia.
Redacción: Erika Hernández.