El mundo del fútbol está de luto tras la trágica muerte de Diogo Jota, estrella del Liverpool y de la selección portuguesa, en un accidente automovilístico ocurrido la madrugada de este jueves en Cernadilla, Zamora, España. Tenía 28 años.
La Federación Portuguesa de Fútbol (FPF) confirmó la devastadora noticia esta mañana, desatando una oleada de condolencias y homenajes por parte de fanáticos, excompañeros y toda la comunidad futbolística. Junto a Jota, también falleció su hermano menor, André Silva, de 26 años, quien jugaba en el Penafiel de la segunda división portuguesa.
El fatal accidente, que la Guardia Civil atribuye preliminarmente al reventón de un neumático mientras el vehículo realizaba una maniobra de adelantamiento, tuvo lugar alrededor de las 00:30 hora local. Según informes de medios españoles, el automóvil, que se presume era un Lamborghini, se incendió posteriormente.
La noticia ha conmocionado especialmente al Liverpool, club con el que Jota ganó la Premier League la temporada pasada, y a la selección nacional de Portugal, donde era una figura clave.
La tragedia es aún más desgarradora si se considera que Diogo Jota se había casado con Rute Cardoso hace apenas dos semanas, y la pareja tenía tres hijos.
El impacto de su fallecimiento se siente profundamente en Portugal, donde Jota era considerado un talento excepcional y un pilar para el futuro del fútbol nacional.
Su pérdida deja un vacío inmenso tanto en el ámbito deportivo como en el personal, y su recuerdo perdurará en la memoria de quienes lo admiraron dentro y fuera de la cancha.
