QUEVEDO. El sabor sin igual de los helados de ‘Don Marquitos’ ya no se podrá degustar en la ciudad de Quevedo. Lamentablemente, Marcos Lino Soledispa murió dejando una profunda tristeza en varias generaciones que al menos una vez en sus vidas le compraron un helado.
Los quevedeños recordarán a este hombre como una persona trabajadora, amable y un ejemplo a seguir por su esfuerzo diario al madrugar para salir a recorrer las calles empujando su carrito de helados de coco buscando ese ingreso económico para sustentar a su familia.
“Yo me levanto a las 06:00 rayo coco, saco el jugo y lo preparo para meter a la máquina. Luego de esto ya los helados están listos para salir a vender a las 09:00. Los conos los vendo a 30 ctvs y los vasitos a 75 ctvs”, fueron las palabras dichas por él en una entrevista en 2018.
Este gran ciudadano está siendo velado en la calle Quinta y Walter Andrade, dónde aún vive uno de sus hermanos. En horas de la tarde, acompañado de las personas que lo quisieron, será sepultado.
