Una joven identificada como Magdalena Aguilar Romero, de 28 años, fue hallada descuartizada y parcialmente cocinada en el estado mexicano de Guerrero.
Aguilar, quien se desempeñaba como nutrióloga, se encontraba desaparecida desde el 13 de enero, cuando habló por teléfono con su madre por última vez.
Los restos de la joven fueron localizados en un local propiedad del ex esposo de Romero. En el lugar fueron encontradas las extremidades parcialmente cocinadas en una olla sobre una parrilla, la pelvis en una bolsa de plástico y el resto del cuerpo dentro de un refrigerador, semi congelado.
Roberto Álvarez Heredia, vocero del Grupo de Coordinación Guerrero, informó que el principal sospechoso del crimen es el ex esposo de la víctima, quien se encuentra prófugo de la justicia.
De ser encontrado culpable del delito de feminicidio, el sujeto podría recibir una condena de al menos 40 años de prisión.