La ruta que conecta el cantón Mocache con Palenque, pasando por Jauneche, se ha convertido en un corredor de alto riesgo. Lo que antes era un camino de orgullo para los agricultores locales, hoy es sinónimo de miedo. La delincuencia, con reportes diarios de muertes, robos y secuestros, ha generado una parálisis en la zona.
Los transportistas y taxistas se niegan a trabajar en la ruta por temor a ser víctimas de la violencia. Quienes aceptan el viaje cobran tarifas excesivas, que oscilan entre $30 y $50, valores inalcanzables para la mayoría de los habitantes. El transporte público pesado, que solía ser una opción, solo opera hasta las 17:20, dejando a los usuarios sin alternativas para movilizarse al anochecer.
Un morador, don Mauricio, describe la situación con temor: «Si alguna persona desconocida viaja en su vehículo por esta ruta debe pagar las consecuencias». La comunidad vive en un constante estado de alerta, y el miedo al secuestro es una realidad diaria.
El horrendo hallazgo
La situación de inseguridad alcanzó un nuevo y macabro nivel el pasado viernes, en el recinto Peñafiel de Abajo, cerca de la Unidad Educativa Vera Sánchez. Las autoridades encontraron cinco sacos que contenían restos humanos.
Personal de la DINASED y Criminalística confirmó que los sacos tenían 19 piezas anatómicas correspondientes a tres cuerpos completos, incluyendo cabezas, torsos, brazos y piernas. Lo más impactante fue el mensaje dejado en un panfleto sobre uno de los sacos: «TODOS LOS LOBOS hjp SE VAN A MORIR».
La Policía Nacional ha relacionado estos asesinatos con la escalada de violencia en El Empalme, atribuyéndolos a una represalia entre las bandas criminales de Los Lobos y Los Choneros. Este atroz suceso ha intensificado el pánico entre los ciudadanos, que claman por ayuda en silencio.