QUEVEDO. De Loja, Pichincha, Manabí, Ambato y más, de todas partes del país, llegaron las personas hasta el cementerio municipal de Quevedo para visitar a sus muertos.
El movimiento empezó desde muy temprano y terminó hasta las altas horas. Estuvo lleno de comerciantes quienes aprovecharon el movimiento para generar recursos.
Detalles
Fausto Gonzales le oraba a la Cruz Mayor porque sus difuntos están en Ambato, y no pudo viajar. “Dicen que la Cruz Mayor es donde se les reza a los familiares que están lejos. Yo aquí tengo amistades, pero no deja de ser un momento de recogimiento y de oración que a la vez te transporta hasta el más allá”, dijo.
Así como él, otras personas llegaron con sus flores, adornos, velas y más… Los visitantes se reencontraron con familiares en el cementerio para compartir historias.
Al mediodía, las familias reunidas aprovecharon para compartir una comida, generalmente la preferida de sus muertos, esto marcó otra tradición que se cumple en la provincia riosense para honrar a los seres queridos.
Mueve el comercio
Los días tradiciones en Ecuador mueven el comercio y este no fue la excepción. En los exteriores del cementerio municipal se colocaron varios negocios de flores y comida. A la par, comerciantes informales aprovecharon para vender sus artículos.
Eddy Dolores llegó con su puesto de comida para vender Ayampaco de tilapia y seco de gallina criolla. En pocos minutos los dos mesones que tenía para sus clientes se llenaron. Contó que su familia está distribuida en gran parte de la Sierra y Costa y que por estas fechas se reúnen en Quevedo. (I)