Quevedo. Alba Coello es una usuaria que ya está cansada de que sus planillas del servicio de energía eléctrica presenten un incremento que cataloga como injustificado, la afectada comenta que esta situación es repetitiva y que se ha presentado en dos inmuebles, uno de su hijo y en la casa donde ella habita. “Este problema se da en una casa que tiene mi hijo, ahí no vive nadie y se generan planillas de hasta 50 dólares y en mi hogar el servicio pasó de 60 a 110 dólares“, expone la usuaria.
“Tengo que hacer público mi descontento porque la empresa eléctrica nos está metiendo la mano al bolsillo a los quevedeños. El mes de abril se me generó una planilla de 49.93 dólares de una vivienda que está deshabitada (‘de mi hijo’). He pedido a la empresa eléctrica que me haga una inspección para que ellos corroboren que la casa está deshabitada y que no se puede generar un consumo tan elevado y no lo hicieron“, cuenta la usuaria.
La mujer agregó que otra de las facturas que le llegó con un alto valor fue una de más de 50 dólares y que aún no realizan la inspección, ella considera injusto que deba pagar el consumo excesivo cuando nadie se beneficia de la energía eléctrica. Asegura que paga lo que reflejan las facturas porque se ve obligada a hacerlo, pues si no cancela los valores se le genera una multa.
Para el próximo 9 de junio, la empresa eléctrica, por fin, realizará una inspección en el inmueble para determinar qué sucede.
La molestia de Alba Coello es en partida doble, pues también se presenta en la vivienda donde ella vive junto a su esposo y dos hijas, en el inmueble se genera la misma problemática, pues confiesa que hasta antes de la colocación de nuevos medidores los valores a pagar eran de máximo 60 dólares, pero ahora superan los 100.
Esta situación ha hecho que Coello visite en varias ocasiones las instalaciones de la empresa eléctrica, pero agrega que aún no ha tenido una respuesta concreta ante su problema.
Frente a la falta de soluciones ha optado por hacer público su caso, con lo cual busca que llegue a quienes administran la institución y tomen correctivos al respecto, ya que este inconveniente lo presentan otros ciudadanos, pero muchas personas no se animan a exponer su problema con este servicio.
La ciudadana confiesa que seguirá protestando hasta que se atienda su pedido y que más personas se unan porque “es la única manera tenemos para ser escuchados para que los administrativos tomen correcciones en estos problemas“.
Ambas viviendas, en las que se evidencia el problema con el cobro excesivo del servicio de energía eléctrica se encuentran en la parroquia El Guayacán.
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