La Asociación de Guías Penitenciarios ha expresado su firme rechazo a la decisión de la Fiscalía de investigar a cuatro de sus miembros en relación con el reciente ataque al Hospital Pablo Arturo Suárez en Quito.
Durante una rueda de prensa, el abogado de la asociación, Paúl Sánchez, denunció las condiciones precarias en las que los funcionarios del Sistema Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de Libertad (SNAI) realizan su trabajo.
El incidente ocurrió mientras los guías penitenciarios trasladaban a tres presos desde la prisión de El Inca. Tres individuos desconocidos abrieron fuego contra la ambulancia en la que viajaban, dejando a un agente herida en estado crítico.
Equipamiento
Sánchez destacó que las guías carecen del equipamiento necesario para llevar a cabo su trabajo de manera segura.
Señaló que los chalecos antibalas utilizados por los funcionarios están caducados, lo que se evidenció con el impacto de un disparo en una de las servidores heridas.
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Además, enfatizó que la camioneta en la que se desplazaban no cuenta con blindaje ni medidas de seguridad adecuadas que debe tener el SNAI-
“Los guías penitenciarios no tienen armas letales ni no letales, y las condiciones en las que realizan su trabajo son inadecuadas”, afirmó Sánchez durante la conferencia.
El abogado también criticó la falta de coordinación entre el SNAI y la Policía Nacional para brindar resguardo durante el traslado de los presos.
Hasta el momento, el SNAI no ha emitido ningún comentario sobre las declaraciones realizadas por la Asociación de Guías Penitenciarios.
La situación ha generado preocupación entre los funcionarios penitenciarios y ha puesto en evidecencia el aliviar la necesidad de mejorar las condiciones de seguridad en el sistema carcelario ecuatoriano.