A un juez se habría pagado 500 mil dólares para absolver al militar Telmo Castro, además de otras irregularidades.
En el juicio en contra de Joaquín “El Chapo Guzmán, en Estados Unidos, Ecuador fue mencionado en varias ocasiones como parte de los países que el narcotraficante involucró para sus negocios ilícitos. Se crearon tres empresas fantasmas que usaron para lavar dinero del narcotráfico en el país.
Líneas aéreas Andinas Lincandisa S. A., comercialización empresarial Teas Busines S.A y Gestores del Ecuador Gestorum S.A., son las tres empresas creadas para lavar el narcodinero, así lo informa el diario el Telégrafo.
Lincandisa S.A estaba dedicada al transporte por vía aérea, mientras que Gestorum S.A a la asesoría jurídica y contable. Actualmente están disueltas y en liquidación.
En los testimonios durante los días de audiencia de este juicio, que terminó declarando culpable a “El Chapo”, se reveló varias conexiones con Ecuador.
Alex Cifuentes, hermano de Jorge Cifuentes, narco colombiano, fue uno de los que entregó su testimonio ante la justicia de Estados Unidos y, en su versión, anunció que un juez ecuatoriano “fue sobornado” con USD$500 mil dólares para “arreglar el caso” del militar Telmo Castro, quien ha sido señalado como uno de los socios del cartel en Ecuador.
Otro de los testimonios fue de la exdiputada por Sinaloa (México), Lucero Sánchez López, quien afirmó que conocía sobre las empresas fantasmas y que fueron creadas en Ecuador por Elkin de Jesús López Salazar para el lavado de dinero.
Según la Superintendencia de compañías de Ecuador, dice la investigación periodística, esas empresas son accionistas entre sí. Uno de los administradores es el colombiano Nicholls Eastman Winston, quien es prófugo y forma parte de la “lista negra” del departamento del tesoro de EE.UU
José Almeida, subdirector general del cumplimiento tributario del SRI, se refirió a estas tres empresas. “Lo que hemos verificado es que estas han sido depuradas de los registros porque no existe actividad económica real. Los registros los cerramos cuando no se evidencia actividad”
(JD)
Fuente: El telégrafo