Quevedo. Con el cierre de los garajes externos, patrullajes externos, redoblando la seguridad y hasta colocando barricadas con sacos de arena en sus instalaciones, así es como la Policía Nacional busca ‘blindarse’ ante los ataques delincuenciales que ya han cobrado la vida de seis policías en los últimos días.
Y es que de acuerdo con el jefe de la Policía Nacional en la subzona Los Ríos, Erick Carrera, la idea es proteger también al personal ya que son seres humanos.
“Hemos visto en algunos lugares como iniciativa colocar sacos de arenas en sus instalaciones y en otros colocar las vallas como es el caso de la Unidad de Vigilancia Comunitaria. Debemos tomar en cuenta que al momento de un atentado también corre peligro nuestras vidas”, detalló Carrera.
El oficial hizo un llamado a la ciudadanía que en el caso de observar alguna actitud sospechosa en los alrededores de las instalaciones policiales se comuniquen de inmediato con el 911 para generar la alerta.
De esa manera, dijo que el sistema integrado se comunica con las personas que están en territorio y así poder actuar de inmediato desplegando a las unidades operativas a los sitios de connotación.
En torno al patrullaje se han tomado nuevas medidas y se ha colocado: un chofer, el jefe de patrulla y dos agentes más, así se busca generar más confianza y se da mayor presencia policial en los operativos.
Y es que luego de que en Guayaquil los antisociales dispararan a una mujer civil que iba dentro de un patrullero policial, los agentes han tomado mayor precauciones realizando la revisión exhaustiva de los detenidos o personas que suben a las unidades tras solicitar el auxilio.
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