Milton Dueñas y Rodolfo Molina fueron baleados en las calles José Mejía y Brasil de la parroquia San Camilo.
Dos hombres en moto llegaron al sitio donde estaban los dirigentes deportivos y les dispararon.
Aún heridos fueron llevados a la clínica La Cigüeña, pero Dueñas, quien se desempeñaba como Presidente del Deportivo Ciudad de Quevedo no resistió las heridas y falleció.
Mientras Rodolfo Molina, secretario de la Asociación de Fútbol luchaba por su vida. Horas después fue llevado a Guayaquil.