QUITO. En casa todos sabían que el exnovio y principal sospechoso de la muerte de la joven Abigaíl Yupangui, significaba un verdadero peligro para ella. Y fue por eso que hasta la ayudaron a cambiarse de residencia junto a la de varios familiares, para que esté más segura.
Sin embargo, su expareja, identificado como Marcelo Pilliza, la seguía y acosaba en su casa y hasta en el trabajo. Incluso, durante el feriado de carnaval le dio una golpiza. Fue por eso que la fémina optó por colocarla una boleta de alejamiento.
Sin embargo, pasaron los días y la boleta no llegaba. Eso dio lugar a que el presunto femicida acuchillara a la fémina hasta asesinarla. Mientras los restos iban de camino al cementerio, sus familiares pedían justicia y recordó que un día antes de victimarla, le hizo un hueco en la pared de su casa para escuchar las pláticas que ella mantenía con su actual novio.
Carlos Fuertes, subcomandante del Distrito Eloy Alfaro, dijo que el hombre no tenía ninguna #boleta en su contra, ya que esta se encontraba en trámite. Recién el jueves anterior el ciudadano iba a ser notificado que tenía una boleta. Por eso, según Fuertes, no había legalidad en la detención del sospechoso. Fuente: ND Noticias